Este otoño descubrimos un delicioso tono, el rubio almendrado, para añadir a las melenas la calidez que necesitan. Y es que, si la luz cambia, los reflejos del cabello también. Por eso, toma nota de las posibilidades que ofrece esta nueva tendencia. 

Miel con toque rojizo

”Llega un rubio ideal para los días otoñales, mucho más cálido, aunque igual de favorecedor. Un tono almendrado con destellos miel y rojizos, y que nos recuerda al mood de la estación. Un rubio que se enciende sutilmente y resulta acogedor gracias a los suaves matices rojos y dorados”, explica M.ª José Llata, directora de Peluquería Llata Carrera en Santa Cruz de Bezana (Cantabria).

En los matices está la diferencia

Y como los matices de los colores para el cabello siempre nos los sugiere la naturaleza o la gastronomía, este rubio se inspira en las galletas de almendras. Carlos Valiente, director de Salones Carlos Valiente en Alzira (Valencia), explica: “Este rubio almendrado nos permite crear matices personalizados para cada persona, según su piel le podemos dar más o menos luz. Es ideal para las melenas ya rubias y mejor si son midi o largas, ya que así permite expresar mejor los detalles mezclándose con tonos más apagados, como el nuez moscada”.

Vitalidad otoñal

“Aporta vitalidad a las melenas rubias, sobre todo aquellas apagadas después del verano. Necesitamos un tono que signifique calma y luz, que es lo que ansiamos en estos meses del año. Por eso, aunque sea un tono cálido, este rubio va a revitalizar el cabello, gracias a la riqueza sutil de destellos que van desde los dorados a los rojizos”, añade Manuel Mon, director de Manuel Mon Estilistas en Oviedo.

Natural y acogedor

La personalización es fundamental porque, si no favorece al rostro, el rubio no es funcional. Así lo asegura Rafael Bueno, director de Rafael Bueno Peluqueros en Málaga: “Como idea, a mi me gusta partir de una base media e ir añadiendo los toques cobrizos para conseguir un resultado natural y acogedor. Esto lo contrastaremos con toques dorados para iluminar la melena, pero sobre todo cerca del rostro, así lo enmarcamos y lo rejuvenecemos”.