El peachy es el último color en sumarse a las opciones de color de fantasía, una mezcla entre el rosa y el naranja con un resultado jugoso y apetecible que encaja con distintos estilos y texturas, también con diferentes tipos de coloración. El peachy ha llegado con ganas de enamorarnos ¡y lo ha conseguido!
Un peachy para ti
Este tono queda bien con todos los tipos de piel, ya que es una especie de naranja neutro y, por tanto, no es tan arriesgado, sino que es fácil que combine bien. Además, el peachy ofrece una multitud de matices tonales que puedes aprovechar para resaltar al máximo tu imagen. "Es un tono pastel ideal para aquellas personas que desean un cambio, pero sin resultar demasiado extravagante. Aporta dulzura, luminosidad y calidez y para conseguirlo no es necesario que partamos de un platino o un blanco, sino que con una base rubia clara es suficiente", asegura M.ª José Llata de Peluquería Llata Carrera desde Santa Cruz de Bezana (Cantabria).
Versiones dulces
Es un tono pastel y se mueve entre la energía más viva de los tonos anaranjados y la ternura del rosa, y justamente por eso es tan especial. "Un modo para sacar su lado más dulce es creando un efecto sombra sobre el cabello, perfecto si tienes el pelo canoso o blanco. Es, además, una manera de darle la vuelta a tu imagen con poco esfuerzo y ganas de asombrar. Si prefieres que tenga más luz, entonces mézclala con una base platino, el resultado es brillante y precioso", propone Raquel Saiz de Salón Blue by Raquel Saiz desde Torrelavega (Cantabria).
Versión neón
Si lo que pretendes es un resultado que transmita toda la vibración del melocotón, entonces escoge un tono más llamativo, aunque sin esconder los matices dulces característicos de este color. "Los tonos fantasía en su versión más llamativa son otra de las grandes tendencias, además de los tonos pasteles. También se puede crear un acabado holográfico a base de mezclar el plata, naranja claro y lila perfecto para melenas de base más oscura. Se trata de ser creativos y nada aburridos", afirma Rafael Bueno de Rafael Bueno Peluqueros desde Málaga.
Matices más naturales
Cuando escogemos tonos más oscuros, el resultado es igual de precioso, consiguiendo una delicada naturalidad. "Para integrarlo en la melena y conseguir un color apasionante, pero más llevable, elige tonos más apagados, como un copper peach, y añádele un efecto raíz creado con ombré o melting. Será más comedido, pero igual de apetecible. También puedes crear unas raíces en tonos rubios que serán sorprendentes, pero no llamarán la atención. Matices plateados, reflejos albaricoque... son solo algunas ideas", señala Felicitas Ordás de Felicitas Hair desde Mataró (Barcelona).
Un cóctel de color
La coloración de fantasía ha venido para sacarnos de nuestra zona de confort, se trata de experimentar y no descartar ninguna idea. "Las combinaciones cromáticas forman parte del mood del momento, se trata de experimentar y, por eso, una melena two-toned puede ser una buena opción. Así que tu peachy puede convivir con tu base castaña o morena perfectamente, una forma además de facilitar su mantenimiento sin restar potencia al look”, declara Manuel Mon de Manuel Mon Estilistas desde Oviedo.
El color es una joya
La coloración es un trabajo artesanal que puede tratar el cabello como una joya. Para conseguirlo, primero hay que escoger el tono que mejor va a resaltar nuestra personalidad y un melocotón rosado puede ser una opción acertada. "El melocotón mezclado con el rosa consigue un rosa fresa saturado que resalta aún más los ojos claros. En un bob impecable se ve perfecto y elegante gracias a ese matiz frío que aporta", manifiesta Charo Garcia de Ilitia Beauty & Science desde Balmaseda (Bizkaia).