La historia de la peluquería se inició en la década de 1880 y tuvo su apogeo entre los años 20-40. Barberías eran considerados un lugar donde los hombres iban a socializarse y pasaban el rato además de ir en busca de un corte de pelo y un afeitado.
En este salón de Savills Barbers la dedicación en los detalles es evidente desde el momento que se entra. El aroma de la loción de afeitar según se entra inmediatamente da la sensación de un ambiente súper masculino. Los acabados de madera en el mobiliario y en el suelo aporta un ambiente cálido y acogedor. Su decoración vintage se puede observar en las antiguas lámparas, las fotos de la época, el piano, los envases... toda la decoración te transporta en una cápsula de tiempo atrás en el pasado. Su atención a los detalles crea un ambiente como ningún otro. A medida que uno se reclina en las viejas sillas de barbero desea ser afeitado con navajas clásicas. Toda una experiencia
El propietario Joth Davies, es un estilista con 25 años de experiencia en la industria. El saón de Savills Barbers ofrece esa atmósfera masculina elegante y acogedora para caballeros que buscan un servicio tradicional en un ambiente de primera clase.