"Desde el momento de su creación en 2008, nuestra intención ha sido que en el salón, aún estando a pleno rendimiento, nunca se produzca sensación de aglomeración. Creemos que ello favorece tanto la creatividad de nuestros colaboradores, como la predisposición de nuestros clientes a poner en nuestras manos algo tan íntimo como su imagen personal", explican desde Lelook. "Con la ampliación del salón hemos creado un espacio que transmite aún mejor nuestra personalidad y que, al mismo tiempo, genera una sensación de sosiego, de calma".
La distribución del salón establece cinco espacios diferenciados y está pensada para que los clientes realicen un circuito que les lleve por las diferentes fases del servicio. Desde el momento en que un cliente entra al salón es atendido y acompañado por uno de los miembros del equipo con lo que cualquier sensación de desasosiego ante la novedad desaparece al instante.
En caso de que sea necesario un tiempo de espera, el cliente encuentra una primera zona donde puede tomar un café o un refresco mientras hojea una de las revistas que hay a su disposición o mientras disfruta de las últimas pasarelas de moda nacionales en el canal cerrado LeLookTV.
Los trabajos técnicos y de coloración se realizan en otra zona del salón dónde destaca la espectacular color bar, creada a partir de la estructura de un andamio. Esta área se ha ideado para que las estilistas y las clientas interactúen directamente sin la intermediación del espejo con lo que la comunicación resulta mucho más fluida. De manera análoga a cuando los grandes cocineros abrieron sus cocinas a la vista del cliente, con la utilización de la color bar el laboratorio queda totalmente abierto. De esta manera, las clientas pueden disfrutar viendo el proceso de pesaje y elaboración de su coloración, al mismo tiempo que se pone en valor el carácter personalizado y exclusivo de los servicios técnicos y de color.
La zona de Hair Care se ha diseñado con una iluminación regulable y con una separación óptica mediante el uso de lamas, para que los clientes puedan relajarse cómodamente reclinados en el lavacabezas, mientras disfrutan de su tratamiento y de un masaje capilar. A continuación, en la Dress Up Area, se ha dispuesto una barra gemela de la color bar, realizada como la anterior a partir de la estructura de un andamio, donde los estilistas tienen a su disposición todos los productos de styling y maquillaje con los que trabajan.
Al finalizar el servicio, y después del retoque de maquillaje con el que se obsequia a las clientas, éstas encuentran los productos de acabado y de maquillaje mucho más accesibles. Pueden verlos, tocarlos, y probarlos, lo que permite reforzar el papel primordial que tienen los productos de styling para el adecuado mantenimiento en casa de la imagen personal que se ha diseñado para ellas.
Junto a la Dress Up Area, se ha establecido su particular Barbershop, una zona pensada exclusivamente para ellos. Contrastando con el diseño minimalista que impera en el resto del salón, en el área de barbería destaca un enorme tocador de madera de castaño, emplazado sobre una pared con una marcada textura. Estos elementos confieren un carácter más duro pero más cálido al espacio masculino. "Con todo ello hemos querido crear un espacio que reivindique el orgullo que le corresponde a la barbería dentro de la peluquería. Un espacio en el que los hombres, reclinados sobre sus cómodos sillones, puedan disfrutar de un buen ritual de afeitado a la misma altura que los rituales de hair care".
Gracias a la ampliación, Lelook también tiene la oportunidad de llevar a cabo acciones y eventos complementarios, como exposiciones, talleres de automaquillaje y workshops en colaboración con distintas personal shoppers y comercios locales.