Cada vez es más frecuente leer consejos e incluso “geniales trucos” para hacer que un salón de peluquería tenga éxito. Personalmente diré, que no creo en los trucos y recetas mágicas si quien las propone no ha disfrutado de ellas y precedentemente se ha convertido en millonario o tiene salones de éxito.

Hace muchos años me hice esta pregunta, que cambió mi vida, y se la hago a todos mis clientes. ¡Es una llave al futuro!

El peluquero no tiene que vender. Si, lo sé, suena contradictorio en este momento en el que tantas personas ofrecen formación para profesionales de la peluquería y sobre todo haciendo hincapié en la importancia de aumentar la facturación apoyándose en las ventas, en algunos casos rayando la manipulación.

La mayoría de las personas se empeñan cada día en alcanzar el éxito. Pero yo me pregunto, ¿qué es el éxito? ¿Hablamos de éxito personal o profesional? ¿Va por separado o es todo uno?

En todo el mundo, en cualquier industria, surgen cada día nuevos emprendedores. Profesionales que desean ir en busca de su sueño y poseer su propio negocio.

¡La unión hace la fuerza! Esto es una realidad, tanto en la vida como en los negocios es mejor tener apoyos y “viajar en compañía”.

Te felicito porque tienes una de las profesiones más bonitas y gratificantes del mundo, por ser artista y artesano. Pero al mismo tiempo, te recuerdo que si eres propietario de un salón de peluquería, eso te convierte en empresario.

Para el éxito de cualquier proyecto es imprescindible contar con un buen equipo. Esto no depende sólo de las habilidades o capacidades de los individuos que lo forman sino más bien de las capacidad de quién los lidera.